domingo, 22 de noviembre de 2009

Pensamientos caninos

  • Mi vida dura unos 10 o 15 años. Cada separación de ti es para mí un sufrimiento. Piénsalo bien antes de adquirirme.
  • Dame tiempo para comprender lo que quieres de mi.
  • Infúndeme confianza, vivo de ella.
  • No te enojes demasiado conmigo y no me encierres como castigo. Tú tienes tu trabajo, tus diversiones y tus amigos. ¡Yo sólo te tengo a ti!
  • Habla conmigo de vez en cuando.
  • Aprende a tratarme como es debido. Yo nunca lo olvido.
  • Antes de pegarme, piensa que mis mandíbulas podrían destrozar fácilmente los huesecillos de tu mano y, sin embargo, no hago uso de ellas.
  • Antes de que me taches de “inútil”, “testarudo” o “perezoso” cuando me pides que haga algo, piensa que ha podido hacerme daño la comida o que he estado demasiado rato al sol o que mi corazón esta cansado.
  • Ocúpate de mí cuando llegue a viejo; también tú lo serás algún día.
  • Quiero que estés a mi lado cuando llegue ese difícil trance. No digas nunca “no puedo resistirlo” o “que suceda cuando yo no me halle presente”. Todo me resultara más fácil si estás conmigo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario